Presentación

Después de una buena base recibida en los cursos inferiores, nuestros alumnos/as entran a trabajar en un formato que se caracteriza por una enseñanza casi prácticamente reglada, si no fuera porque no se imparten el número de horas que se estipulan, pero si en el rigor de lo que asumimos a la hora de la enseñanza de la técnica y de la disciplina que transmitimos. Teniendo como finalidad asegurar una formación que proporcione el nivel de expresión artística y técnica propio de cada especialidad que impartimos (danza clásica “ballet”, danza española y flamenco).

En esta etapa nuestros alumnos/as reciben la formación que se va adecuando al su nivel evolutivo y a las capacidades básicas desarrolladas hasta el momento para un mejor aprovechamiento de las clases.

En el flamenco, en esta área se trabaja desde una colocación que aportan las otras áreas descritas, pero con una identidad muy personal e imprimiendo el carácter que este propio baile tiene. Debido a la gran variedad de palos y toda la riqueza de matices particulares que cada uno tiene de manera particular, se estudian adecuándolos al nivel del alumnado, siendo los más adecuados los que requieren menos profundización en sus matices.

Aunque estas clases se realizan como un continuo, no dejan de tener una estructura para su realización haciéndolo de una manera progresiva:

• En su inicio se realizan ejercicios de calentamiento y de preparación del cuerpo para un buen desarrollo de la clase, donde priva la técnica y la buena ejecución de los pasos propuestos para que se realicen convenientemente en relación con la mejora de la velocidad-coordinación, la velocidad específica y de reacción.
• Durante una segunda parte se van introduciendo progresiones en las que se producen desplazamientos, marcajes, paseos, giros… para ir construyendo pequeñas coreografías que darán pie a la realización del baile que se trabajara de una manera más concreta en la última parte de la clase. El énfasis en esta parte de la clase es ir realizando lo marcado con la mayor corrección e ir interiorizando los matices de dicho palo.

Por último, se realiza la coreografía que el profesor va creando, adecuando los contenidos al nivel que el propio curso tiene, y dándole el carácter personal que cada alumno puede expresar en su realización